12 - 07 - 2.013 Día 63

             Ayer cumplí los 20.000 km de viaje, ya solo quedan unos 70-80.000 ja,ja. También ha estado toda la noche lloviendo, parece que aquí llueve todas la noches. Hoy tocaba visitar Tiblisi fundada en el siglo VI por el rey Vajtang Gorgasali y ciudad que en el siglo XII fue el centro político, económico y cultural más importante de toda el Asia Central.

Lo primero subir a la fortaleza de Jarícala antes de que apriete mucho el calor, domina la zona antigua de la ciudad y el río.

 

Parece que se están uniendo a la fiebre de construir edificios modernistas, ultra-costosos y poco prácticos para realizar la función para la cual deberían de estar diseñados, firmados por arquitectos de reconocido prestigio que no aparecen por las obras.

Tras recorrer la ciudad antigua, en las faldas de la fortaleza, como no en cuesta y con calles empedradas me he dirigido a la Iglesia de Meteji. Había muchos alumnos de arte decorando cerámicas y pintando al óleo voceos de la fortaleza.

La Catedral de la Santa Trinidad resalta sobre toda la ciudad con su cúpula dorada, están oficiando misa y se oyen los canticos ortodoxos desde el exterior.

 

Antes de ir a la zona noble de la ciudad he comido un durum en el barrio viejo (5 lueu unos 2,4€), distinto, no se parece ni a los turcos ni a los españoles; pero era muy grande y no estaba malo.

 En el ensanche de la ciudad, largas avenidas, mucho edificio burocrático de majestuosas fachadas, tiendas de Guchi, Cartier, y mucho hotel Marriot, Hilton, Sheraton, …. veo turistas comiendo en sus cafeterías y me pregunto, ¿cuánto se habrán gastado estos en una o dos semanas? Seguro que lo que yo en dos meses.

Hay bastantes obras aunque en la mayoría construyen a su manera, cero leus invertidos en seguridad, es normal ver encofrando pilares y fondeando un forjado en la décima planta sin redes de seguridad, ni barandillas, ni arnés, ni nada de nada.