“De Java a Gudairi he ido más o menos recto, google maps, simplemente no me deja seleccionar esos caminos”
Esta mañana
tras recoger la colada rumbo a Mtskheta, antigua capital de Georgia. Visita al
monasterio de Jvari, a la Catedral de Svetitskhoveli y otras iglesias de la
zona.
Al circular
por la carretera me he ido dando cuenta de que hay muchos coches con volante a
la derecha, aquí se circula por la derecha como en España, serán importados de
segunda mano del Reino Unido. He continuado hasta Gori, ciudad natal de Stalin.
Además de su casa natal, que está protegida por un panteón de piedra, he estado
en el Museo de Stalin, en la fortaleza de Gori, y en el monumento a los caídos
en la Segunda Guerra Mundial.
Eran las 13:30
y apretaba el calor, 33º, tras parar a comer en un recodo de la carretera me he
dirigido hacia las montañas de Osetia del Sur. En 30 km cambia el paisaje
totalmente, bosques de hayas, verdes prados, montañas y valles,…. y la carretera
que desaparece. Simplemente no hay carreteras, son pistas, unas en mejor y
otras en peor estado.
Tras llegar a
Java me he dirigido a Gudairi, quería salir de allí y volver al asfalto, 32º y 70
km de pistas y caminos, ni he sacado fotos apenas ni he grabado video; estaba
sudando sin parar entre el calor y la tensión de circular por esos caminos de
canto rodado de rio, todo el tiempo en 1ª y 2ª.
En Gudairi seguía sin asfalto y he decidido ir
hacia la capital Tiflis otra vez, el Gps marcaba que me quedaban 130 km y según
el mapa la carretera era amarilla (comarcal), ni caso otra pista aunque un poco
mejor, estaba comenzando a oscurecer y se me plantea la duda de acampar o
llegar a Tiflis sea la hora que sea e ir al hotel de ayer.
No veo caminos
practicables que me alejen de la pista principal para acampar escondido en
alguna campa que no se vea, y además no me siento seguro aquí. Hay mucho
mercedes modelo antiguo semi-destrozado circulando, estos seguro que no han
llegado aquí legalmente…, delante de mí, en un tramo de pista en condiciones
aceptables, justo cuando le estaba adelantando a uno se le ha partido el eje delantero
y la rueda derecha se le ha metido debajo del coche provocando gran cantidad de
chispas en el roce con las piedras.
Estaba decidido hay que llegar a Tiflis, solo
a falta de 30 km ha vuelto a aparecer el asfalto, el resto pistas, he llegado
de noche y molido. Las viejillas del hotel se han alegrado al verme de nuevo y
estoy en la misma habitación de ayer, no creo que haya muchas más ocupadas.
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