jueves, 13 de junio de 2013

13 - 06 - 2.013 Día 34




          Esta noche ha estado lloviendo sin parar en Prizren, por la mañana todavía caía algo aunque débilmente; traje de agua y hacia Prístina. Por el camino me voy fijando en las gasolineras, la 95 está a 1,19 €; Kosovo como Montenegro aunque no pertenecen a la UE usan el euro como moneda.

A la llegada a Prístina recorrido rápido, no tiene mucho que ver y hay que ir pronto hacia Albania. Sobre las 10:30 cruzo la frontera, en la de Kosovo ni estaban, y en la de Albania enseño pasaporte y documentación de la moto; había oído que si había que pagar algo, a mi no me han cobrado nada, ni a la entrada ni a la salida.
Ya una vez en Albania a la expectativa de cómo encontraría las carreteras, de momento iba por una autovía bien asfaltada, de doble carril (menos en los puentes) y con vacas pastando por las cunetas. La autovía duraría hasta unos 50 km antes de Tirana, pasaría a convertirse en carretera de un carril con buen asfalto (para estos países, en España nos quejaríamos). Todavía en la autovía he parado a quitarme el traje de agua, ya que al descender de las montañas del norte, el cielo se despejaba y comenzaba a hacer calor. Posteriormente iría todo el camino entre 29 y 32º.
Tomo dirección Durres y de ahí a Fier, solo he pasado dos tramos de unos 200 m sin asfalto, estaban en obras y el firme estaba bastante bien (mucho mejor que las obras de Croacia…). Tenía que dirigirme hacia Gjirocastër y había dos opciones: a) ir por Vlone hasta Tepelene, por la SH76, casi seguro carretera asfaltada en su totalidad; o b) ir por una carretera peor por el norte de un río, la SH4. Cruzar Albania sin haber pisado nada marrón no estaría bien, no?
Pues por la SH4, la mayoría de los km también estaban asfaltados; aunque con grandes agujeros, desniveles, tramos de 100-200 m sin asalto y tipo camino de cabras; un deportivo no podría circular por ahí. Pero ha llegado un punto a unos 40 km de Tepelene en el que ha desaparecido el asfalto durante unos 18 km, había zonas que estaban bien y otras con demasiada grava suelta. Pero bien, iba más preocupado de adelantar al coche de delante que iba demasiado despacio y frenaba de repente, que de la carretera.



Una vez en Gjirocastër, buena carretera asfaltada hasta la frontera. Resumiendo, la ruta que he realizado yo se puede hacer perfectamente sin salir del asfalto, no he visto que las carreteras estén tan mal como se comenta, ni montones de escombro por las cunetas, ni bunkers a cada paso (en todo el recorrido no he visto más de 10). Aclarar que hablo del recorrido que he hecho, del resto ni idea.
En Albania ni he cambiado dinero ni he repostado, he rellenado el depósito antes de salir de Kosovo, he llegado a Grecia y todavía me queda. Por cierto en Grecia la 95 anda por 1,70 € de media. 
En la frontera albanesa pasaporte y listo, en la griega son muy lentos con los coches albanos, no sé que les piden pero tardan un huevo. Cuando me ha tocado pasaporte y documentación moto. Como no sabía hasta donde iba a llegar hoy, en función del estado de las carreteras, no tenía nada para dormir. Nada más pasar a Grecia hay una zona montañosa con un montón de buenos sitios para la acampada libre, pero con la sudada y el montón de polvo que llevaba encima me apetecía más darme una buena ducha que cualquier otra cosa.

Me he dirigido a Igoumenitsa y he aparcado en el malecón de la playa delante de todas las terracitas, ¡aquí pillo wifi fijo! Efectivamente, me he conectado y he reservado un apartamento con cocina, desayuno y wifi por 25 € en Parga (a unos 40 km).

 
 

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