martes, 18 de junio de 2013

17 - 06 - 2.013 Día 38



           Ayer por la noche aprovechando el calor que hacía y que la habitación tiene terraza lave unas camisetas, esta mañana estaban completamente secas. Esta noche seguiré con la colada.

Ya desde las 9 de la mañana 30º, me acerco en la moto a recorrer Atenas, aparco en el mismo sitio de ayer (en el paseo que va al Parthenon) y tiro hacia el lado contrario. Visito el Arco de Adriano, el Estadio Olimpico, el Parlamento y un montón de sinagogas y ruinas griegas en las inmediaciones de la colina del Parthenon.






A las 3 de la tarde cuando el calor ya es insoportable regreso al hotel a tumbarme un rato y a preparar los siguientes días. Entonces de repente aparece en el portátil la pantalla del virus de la policía en griego y me bloquea el ordenador completamente, que hago ahora?
Intento arrancar a prueba de fallos, restaurar y nada. En el móvil no tenía internet, pues la conexión del hotel era un poco rara, en vez de estar libre o con un password te daban un código de usuario y una clave para entrar; como me temía que solo iba a valer para una conexión me conecte primero con el ordenador, luego lo intente con el móvil y no me dejaba al estar la línea ya en uso.
Me acorde que llegando al hotel había visto un locutorio con ordenadores, pues vamos a preguntar allí a ver si el dueño controla un poco. Hay que decir que el barrio en el que estaba el hotel era un poco marginal, al anochecer las esquinas se llenaban de “trabajadoras del amor libre” y en su mayoría la población era musulmana. El Mohamed del locutorio tenía menos idea que yo todavía, que ya es decir.
Ala vete a patear el barrio con el móvil con el wifi conectado a ver dónde pillas una libre, al ser un barrio tan chungo me costó casi una hora encontrar una. Mando un whatsapp a mi amigo David, que se supone que controla un poco de esto, tras explicarle lo que ha pasado me da las indicaciones para restaurarlo, pero no va.
“Hombre otra opción es formatear, pero pierdes todo lo que tengas” Tengo todo en los discos externos, lo único que perderé son los programas, vamos a ello. Me explica como comenzar y luego es seguir los pasos.
Había que haberme visto sentado en el suelo junto a una cafetería con el portátil y el móvil, y  con cuidado de quien se acercaba demasiado.
Uff!!! Que alivio …. Me había embajonado bastante lo del ordenador, ¿y que hago yo ahora sin portátil? ¿es fundamental? Si apenas llevo mes y medio …… y ya empezamos …..
Ahora me toca ir bajando los programas que he perdido cuando pille wifis decentes.
Tras todo este marrón otra colada de ropa colgada en la terraza como puedo y ya tengo toda la ropa limpia. A la cama que menudo día llevamos.



 
 

1 comentario:

  1. Desde luego que poca clase colgar de esa manera la ropa, aisssssssssssss, tu juroooooooo. Venga colega , sigue pa lante!!!!!!!!!! Vsssssssssssss

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